Andrés Calamaro celebra hoy su cumpleaños número 63. Considerado uno de los íconos del rock argentino, comenzó su carrera artística con tan solo 13 años y además de su extensa y exitosa carrera solista, formó parte de bandas icónicas como Los Abuelos de la Nada y Los Rodríguez.
Calamaro nació el 22 de agosto de 1961 y mostró un talento inusual para la música desde muy chico. A los ocho años ya dominaba el bandoneón y a los 17 debutó como tecladista en la banda de candombe-rock Raíces.
Su habilidad con el teclado lo llevó a tocar con Los Abuelos de la Nada, donde compuso algunos de sus mayores éxitos como Mil horas y Sin gamulán. Durante aquella etapa, participó también como compositor en obras teatrales y colaboró con otros artistas icónicos del país, como Charly García y Fito Páez.
Pero Calamaro no paró ahí, sino que, en 1984, lanzó su primer álbum solista, Hotel Calamaro, aunque este fue ignorado por el público. Después de integrarse a otras bandas como Las Ligas, y a seguir colaborando con figuras del rock argentino, pudo colocarse entre los artistas más creativos de su época, pero no sería hasta la década del 90 en que su carrera tomaría un rumbo internacional.
En 1991, Calamaro emigró a España y fundó Los Rodríguez, una banda que marcó un antes y un después en el rock en español. Junto a Ariel Rot, Julián Infante y Germán Vilella, editaron álbumes icónicos como Buena suerte y Sin documentos, aunque la canción "Mi enfermedad", que se convirtió en un himno del rock, los lanzó automáticamente al éxito tanto en Latinoamérica como en España.
Después de que Los Rodríguez se disolvieran en 1996 por internas en la banda, Calamaro lanzó su carrera solista con el álbum Alta Suciedad, un éxito rotundo que vendió más de 500 mil copias. Pero su proyecto más ambicioso fue El Salmón, un álbum histórico por incluir cinco discos y más de 100 canciones, que dejó clara su enorme capacidad para crear poesía.
El músico nunca dejó de experimentar y en los años 2000 lanzó álbumes como El Cantante y Tinta Roja, en los que explora géneros como el tango y la música latinoamericana. Cuando volvió a los escenarios en Argentina, fue recibido con un icónico show documentado en El regreso, que lo dejó consolidado como una verdadera leyenda del rock.
El reconocimiento, que no podía tardar más, le llegó en 2009 cuando ganó su primer Grammy Latino por La lengua popular (un galardón que repetiría cuatro veces más). Hoy por hoy, Calamaro sigue siendo una figura esencial en la industria del rock, que se reinventa constantemente para seguir conquistando al público.
Andrés Calamaro cumple 63 años: sus 10 canciones más emblemáticas
Mil horas
El tema integra el disco Vasos y besos (1983) de Los Abuelos de la Nada y se convirtió en un hit inmediato, al punto que VH1 Latinoamérica la ubicó en el número 5 de la lista de las 100 grandes canciones de los ochenta en español, mientras que Rolling Stone en el puesto 14 de los 100 hits del rock argentino en 2002.
Mi enfermedad
En la década del 90 Calamaro partió a España y se unió a Ariel Rot y Julián Infante para su nuevo proyecto musical, Los Rodríguez. El primer álbum de la banda, Buena suerte (1991), contiene el tema Mi enfermedad, que fue reversionado y popularizado también por Fabiana Cantilo.
No se puede vivir del amor
En 1993 Calamaro hizo un viaje relámpago a Buenos Aires y editó Grabaciones encontradas (Volumen 1). En palabras del músico, "es mi legado íntimo, están algunas cosas que siempre quise publicar y que amenazaban con petrificarse en un imaginario cofre de grabaciones perdidas". El volumen incluyó el éxito No se puede vivir del amor.
Sin documentos
También en 1993, publicó con Los Rodríguez la canción Sin documentos, que se convirtió en un éxito en las radios nacionales y derivó en giras por España y Latinoamérica.
Flaca
Con más de 238 millones de reproducciones en YouTube, es el tema más conocido del artista. Según reveló el músico, la canción fue dedicada a Mónica García, la mujer con la que se casó en secreto en 1992. Fue parte del disco Alta suciedad (1997), que marcó el reinicio como solista del artista. En el álbum, también se destacó el tema Loco y Crímenes perfectos, entre otros éxitos.
La parte de adelante
Una canción del disco Honestidad brutal (1999), que contiene 37 canciones compuestas entre 1998 y 1999 durante su gira por Nueva York, Miami, Madrid y Buenos Aires tras el éxito de Alta suciedad (1997). Según el propio Calamaro, los temas de ese disco fueron resultado de la separación de su novia española, noches de insomnio y viajes en avión.
Paloma
Andrés se inspiró en una joven de Santa Rosa para componer esta canción. Paloma Pluss es "Paloma", una joven pampeana que inspiró un clásico del rock nacional. Fue en marzo de 1998. Tenía 18 años cuando le mordió el labio al Salmón tras finalizar un recital en el Club Estudiantes.
Crímenes perfectos
“Crímenes perfectos” una canción redonda que describe magistralmente el profundo dolor de un hombre sufriendo por amor. Aunque Andrés trate de sacarle méritos a su composición cuando declara “Para mí es una canción entre sencilla y vulgar, una balada de rock con estrofa, estribillo y puente".
Soy tuyo
En Soy tuyo, la intensidad de las emociones se ve reflejada en la pasión con la que el narrador describe su deseo de fusionarse con su pareja, tanto física como emocionalmente. Las metáforas de 'desarmarse' y 'naufragar' en la otra persona ilustran la vulnerabilidad y la profundidad de su amor.
Tuyo siempre